Preparándonos para los orgasmos múltiples

El hecho de lograr múltiples orgasmos en un hombre es algo remarcable, pero nos llevara un tiempo concientizarnos y prepararnos para logar nuestro cometido.

Como mencionamos anteriormente uno de los primeros pasos es el descubrimiento del musculo PC. Es esencial familiarizarnos con ese musculo para aprender a controlarlo de manera precisa.

Mucho de este control aparece con la experiencia, pero, por otro lado se reforzara con el endurecimiento a través de la ejercitación regular. Una vez que se haya descubierto en donde se encuentra (es más fácil localizarlo mientras se orina); una vez localizado puede ejercitarse en cualquier momento y en cualquier lugar.

La practica debe experimentarse al principio, a través de la masturbación acostándonos confortablemente y comenzando como una práctica corriente. Debemos detenernos justo antes de alcanzar el punto de no retorno (el punto anterior a la eyaculación). Contraeremos y mantendremos tensionado el musculo PC y contaremos hasta 10. Durante ese momento nos relajaremos.

Comenzaremos nuevamente a masturbarnos esta vez acercándonos más al punto de no retorno contrayendo el musculo PC. Continuaremos masturbándonos prestando especial atención a nuestra excitación (la cual debe ser extrema) y a nuestras emociones. La clave de todo este proceso es la de aprender más acerca de nuestra propia respuesta sexual. Con la práctica de estas técnicas daremos el primer paso a un mundo nuevo de sensaciones.

Como es posible lograr múltiples orgasmos?

Los “ciclos de respuesta” del hombre y de la mujer son muy similares. La diferencia primaria entre ambos es la eyaculación en el hombre.

Las mujeres multiorgasmicas son capaces de lograr muchos orgasmos si la estimulación continua un poco después de lograr su primer clímax debido a que ellas no eyaculan (no hay que malinterpretar los datos que afirman que algunas mujeres son capaces de eyacular, si bien no ha podido ser científicamente explicado).

La eyaculación en el hombre inicia un periodo de refracción. Durante ese tiempo, muchos hombres no son capaces de lograr otra erección o aun de recibir algún tipo de estimulación debido a la perdida de tensión sexual; además de la sensibilidad que logra el pene al tacto. 

Dado que las mujeres no están biológicamente programadas para eyacular, ellas no tienen que padecer la “espera” y por ende ser capaces de experimentar la sensación de lograr múltiples orgasmos mucho más fácilmente que los hombres.

La primera clave es la de comprender como los hombres podemos llegar a tener múltiples orgasmos es la distinguir y separar que tanto el orgasmo como la eyaculación son dos eventos totalmente diferentes y por lo tanto separables. 

La mayoría de los hombres han siempre aceptado al orgasmo y a la eyaculación como una sola unidad debido a la simultaneidad con la que suceden. Si bien el orgasmo comienza un poco tiempo antes que la eyaculación, concluye con esta.

La segunda clave para comenzar el camino de los múltiples orgasmos es la de diferenciar el orgasmo de la eyaculación.

La habilidad en separar estos eventos toma como parte al musculo pubeocoxigeo, o musculo pélvico o ”PC “, como más comúnmente se lo conoce. Uno puede localizar a este musculo simplemente por la capacidad que tiene para detener el flujo de orina durante una micción. Si cuando se quiere detener la orina al activar este musculo resulta dificultoso, el musculo necesitara más entrenamiento. El reforzar el musculo es sencillo, bastara con realizar el reflejo varias veces al día en series de 50 o 100 repeticiones.